Zombie Strippers (2008)

Propicios días, hatajo de seres vivos infestados de enfermedades. Aquí está otra vez escribiendo vuestro entrañable vecino y amigo, el Zombie Verde, que vuelve para destriparos... ¡una nueva película de zombies! Lo de "destriparos..." es un chiste para cadáveres antropófagos, no esperaba que lo entendieseis.

Hoy, en mi ya habitual falta de quehaceres sociales me he sentado a ver una cinta de 2008, Zombie Strippers. En mi defensa he de decir que mi actual estado de falta de contacto humano se debe única y exclusivamente al olor que desprendo debido a mi avanzado estado de descomposición... vamos, que si estuviese vivo estaría por ahí, alternando con supermodelos y acudiendo como invitado a todos los saraos de la peña que mola... Y no aquí, comentando una película para aficionados al cine gore.

Hace casi dos años que pude ver el primer trailer en youtube. Su lanzamiento llegó poco después de que Robert Rodríguez y Quentin Tarantino sacasen su par de películas con rollito Grindhouse, razón por la que creo que me llamó tanto la atención el poster y el planteamiento en sí. Mi expectación y la del resto del mundo fue creciendo más si cabe con el paso del tiempo, no olvidemos que la película contaba con Jenna Jameson como protagonista, todo un handicap para el varón heterosexual medio.

Estas son las razones que impulsaron en un primer lugar a este pobre lechón a visionar esta cinta, bueno, estas y el altruista propósito de indexar y analizar cuantas películas del subgénero no-muerto pueda antes de que los gusanos me reclamen definitivamente. Es por esto por lo que hoy os traigo Zombie Strippers. Nunca hubo una película de zombies con tanta carne. Nunca.



Título: "Zombie Strippers"
Tïtulo original: "Zombie Strippers"
Dirección: Jay Lee
País: EEUU
Año: 2008
Duración: 94 minutos
Género: Comedia
Reparto: Jenna Jameson, Robert Englund, Shamron Moore, Jennyfer Holland.

ARGUMENTO

En un futuro no muy lejano, sumidos en la cuarta legislatura consecutiva de George W. Bush, una empresa armamentística tiene la respuesta para los problemas militares de América: una toxina que permite que los soldados muertos vuelvan a la vida, pudiendo luchar en una nueva batalla. Sin duda un avance de este tipo haría que los yankis venciesen en todas y cada una de las guerras en las que participan en este momento, que deben de ser unas diez, con lo que a priori, la ciencia ha dado una alegría al Tío Sam.

Sin embargo, y como suele suceder en todas estas películas, algo falló. La toxina funciona, sólo que afecta directamente al cromosoma X, lo que supone una efectividad del 100% cuando el huésped es una mujer. No sólo vuelve a la vida, sino que lo hace dotada de una mayor fuerza y resistencia. Sin embargo, cuando el huésped es un hombre, éste se convierte directamente en un zombie de los de toda la vida, con su andar patizambo, su mirada perdida y su manía de perseguir a los vivos para cruspírselos.

Estos resultados son comprobados por la empresa, Industrias W, quien tras testar su toxina con desechos sociales a quien no les quedó otro remedio que vender su cuerpo a la ciencia ("la clase media americana") solicitan ayuda de un comando de élite del ejército para acabar con la plaga que asola sus instalaciones. Pese a que la eficiencia de los marines es total, uno de ellos resulta infectado y, cagado de miedo por lo que le pueda suceder si alguien se entera, logra escabullirse de los laboratorios para ocultarse en un club de striptease cercano.

Una vez allí el virus comienza a propagarse entre las chicas, que se convierten en zombie strippers y son adoradas por los desfasados y sentimentalmente obtusos clientes del local... con eróticos y necrofílicos resultados.

EL ZOMBIE VERDE OPINA

Ahora es cuando callan las trompetas y hablo yo. La mera idea de una película de zombies protagonizada por Jenna Jameson y Robert Englund hace que cualquier lector racional fabrique una idea preconcebida (y, anticipo, errónea) sobre que la película tiene que ser una mierda como la copa de un pino. Es verdad. Yo también lo pensé. Pensé "tiene que ser la mayor bazobia que nunca se ha rodado". No sólo me quitaron la razón "Mentiras y Gordas" y "Las Guerras Clon". No. Resulta que Zombie Strippers es una comedia zombie bastante digna como para aprobar con nota el análisis de este incorregible y exigente cadáver.

La película arranca, como ya es un clásico dentro de este género, con un informativo que nos sitúa en un futuro cercano, pero no tan descabellado para el momento en que se estrenó el filme (cuatro meses antes de las elecciones americanas).

Así arranca. Para los que no estéis famirializados con el idioma de Shakespeare os lo casco abajo en el vuestro, por aquello de que soy un tipo leído y considerado.



"George W. Bush empieza su cuarta legislatura consecutiva como presidente del Gobierno por mayoría absoluta en todos los estados, menos en Florida, donde debido a un error informático en los terminales de votación sólo se emitió un voto en favor del presidente Bush, y otro en favor del vicepresidente Swarchzennegger. La corte suprema ha declarado que la elección de Bush ha sido completamente legal, y la encargada de Justicia, Gina Bush ha dicho que le parece "superguay"... luego se fue a celebrarlo y pilló una moña impresionante. Además se ha aprobado una medida constituccional que prohíbe la desnudez pública. Poco después el presidente Bush disolvió el Congreso y argumentó que "le cortaban las alas". Las tropas estadounidenses siguen afrontando una fuerte crisis debido a los conflictos de Irak, Afganistán, Siria, Irán, Líbano, Libia, Paquistán, Venezuela, Francia, Canadá y Alaska."

Joder. Por lo menos no se puede decir que el colega Jay Lee fuese un acojonao. Si a eso le sumamos que la empresa encargada de fabricar un suero milagroso para esquivar a la muerte se llama "Industrias W" y que su logo es el monte Rushmore con la cara de George Bush a la izquierda ya tenemos el belén político montao. Por otra parte, al público de una bizarrada como esta le importa más bien poco... como mucho les ayuda a echarse unas risillas... sobre todo si se han fumado uno de esos cigarretes de la risa que tanto gustan a los aficionados a la serie B.

Bien, de ahí se nos lleva a las instalaciones de Industrias W, donde están teniendo un problema de infección galopante, por lo que acuden al rescate un comando de militares de élite formado por todos los arquetipos posibles: el friki, el jefe, el loco, las tres mujeres espectaculares (Jessica Custodio y Laura Bach entre ellas, pandafrikis... ya estais googleando imágenes) y gran cantidad de munición y referencias pasadas de "El Sargento de Hierro".

Tras la pertinente masacre, digna de cualquier película del género (no lo olvidemos), nos trasladamos al Rhino, el club de striptease en el que se desarrolla el resto de la película. De entrada nos topamos con el numerito de Kat (Jenna Jameson), y así, despelote tras despelote, nos van presentando a todas las chicas del club, y a la postre todos los personajes de la película. Por la pasarela del Rhino discurren varias mujeres espectaculares, algunas como Shamron Moore asiduas a publicaciones como Playboy. Asimismo conocemos al resto de los trabajadores del Burdel: la madame, una clásica Stripper venida a menos; el pinchadiscos; el inmigrante mexicano al que todos putean (y que por momentos recuerda a Scraffy, el bedel de Futurama); y el gran Robert Englund, que interpreta al maniático gerente del Club.

Lo realmente hilarante comienza cuando Jenna se contagia. Antes de ver la peli sabía perfectamente que, en vuestra desesperación, no le haríais ascos a una estrella del porno ni aunque estuviese muerta. Tras verla estoy seguro. Como ya comenté, el virus no convierte a las mujeres en zombies sin voluntad, eso lo hace sólo con los hombres. A las mujeres las convierte en prodigios de vitalidad y poderío físico, con lo que la nueva Kat sigue saliendo a hacer sus numeritos, pero muerta. Algo que, lejos de asustar y espantar a la clientela del club, hace que esta se multiplique. Esto lleva a que otras chicas, ansiando sentirse deseadas, accedan a ser infectadas por Jenna, convirtiendo el espectáculo de las strippers zombies en la base del negocio, para deleite de un sobreactuado Robert Englund, que se pasa la mayor parte de la cinta riéndose como los malos de los dibujos animados.

A partir de ahí la bizarrada más absoluta se hace realidad. Strippers comiéndose clientes y luchando unas con otras por molar más que ninguna mientras Englund y el resto del personal luchan por sobrevivir y forrarse a costa de los necrófilos que frecuentan el club.

¿Y el resultado? ¿Queda bien o mal? ¿Dan ganas de apagarla y mandarlo todo a la mierda? No. Nunca. Queda de puta madre. Buen gore, buena banda sonora, un argumento propio de la Serie B más radical, y unas actuaciones realmente buenas, por sobreactuadas que pareciesen (no deja de ser una comedia, también sobreactuaban los Monty Python y no oigo a ningún gafapasta quejarse, por cierto, tú, gafapasta, fuera de este blog), y en definitiva una película sobre zombies más que digna.

¿Personajes hilarantes? Muchos. La stripper virgen y fanática religiosa que sólo busca sacar algo de dinero para pagar a su abuela una colostomía, el aguililla que se la quiere cepillar, el mexicano encargado de mantenimiento, el zombie al que le arrancan la mandíbula inferior, el marine aficionado a los cuchillos, joder, es que hay "cienes" de ellos.

Entretenida y, en definitiva, de visionado obligado para cualquier aficionado al género.

TRAILER



VALORACIÓN GLOBAL: 8

Bizarro, bizarrísimo, pero genial. La película, al margen de su retorcido argumento tiene todo lo que busca un friki en una película: humor negro, tetas y culos, armas, marines, zombies y Jenna Jameson. Alucinante, y lo más increible a priori: entretenida. Claro, si nos estás leyendo y eres mujer es probable que pienses que podrían recortarse algunas escenas, y que para presentarnos a las chicas no las tenemos que ver en porretas, que con ponerlas en fila y decir sus nombres llegaba. Puede ser. Por suerte Jay Lee no pensó lo mismo.

Hasta otra, cachofrikis.